Comer en el corazón del Camping de Las Menas.
Hay sitios que uno visita por tradición, por nostalgia o por simple conexión con el entorno. Eso nos pasa cada año con el Camping de Las Menas, en plena sierra de Serón. Sus cabañas de madera nos acogen unos días, y como buenos tragaldabas rurales, acabamos sentados en una de sus mesas para comer en el Bar Mesón Las Menas, el restaurante del propio camping. Y hoy te contamos qué tal comimos.
📍 Un entorno natural que ya alimenta
Lo primero que te gana es el entorno. En pleno paraje de Las Menas de Serón, este mesón es parte del complejo del camping, rodeado de pinares, senderos y silencio. Ojo, que no estamos hablando de un restaurante de carretera ni de postureo. Aquí se viene tras una caminata, con hambre real, la cara colorá del fresquito de la montaña (en invierno), y ganas de cuchara.
El Bar Mesón Las Menas tiene lo justo y necesario: comedor interior, terraza amplia, zona de juegos para peques, una especie de ludoteca, y hasta una mesa de ping pong para soltar a los niños mientras tú te tomas el café sin remordimientos. Por sitio no será, y por aparcamiento tampoco.
🍽️ Qué pedimos (y lo que dio de sí)
En nuestra visita, como ya es costumbre, pedimos para compartir y probar un poco de todo:
- Ensalada Las Menas 🍅🥬
- Plato de cuchara del día 🥄
- Jamón asado con salsa 🍖
- Migas con tropezones 🥘
- Hamburguesa doble con queso 🧀🍔
- Postres caseros: natillas y arroz con leche 🍮
Y sí, con bebida incluida, porque una jarra de cerveza bien fresquita después de caminar por la sierra sienta como gloria.
✅ Lo bueno del Bar Mesón Las Menas
Atención cercana y ambiente familiar
Se nota que están acostumbrados a recibir familias, grupos y visitantes habituales del camping. El trato es cercano, amable y sin prisas (aunque de esto hablaremos más adelante). Si necesitas algo para los niños, lo tienen. ¿Que el pequeño no quiere cuchara? No pasa nada, tienen hamburguesas, patatas, filetes… Lo justo y necesario sin complicarse.
Carta breve, pero acertada
Nada de cien platos imposibles de elegir. Aquí la carta es escueta, lo cual agradecemos. Y aún así, hay variedad suficiente para combinar opciones más caseras con otras más “infantiles”. Platos de cuchara, carnes al horno o a la plancha, algunas opciones vegetarianas, migas (¡cómo no!) y postres caseros. Lo que lees, es lo que hay.
Comida casera sin florituras
No vinimos buscando estrellas Michelín, vinimos buscando calor de cuchara y sabor de pueblo. El plato de cuchara estaba rico, sabroso, bien ligado. Las migas, como deben ser, con sus tropezones, su pimiento frito y su punto justo de sal. Las raciones, generosas, sin ser excesivas.
El jamón asado, aunque con altibajos (luego lo detallamos), venía acompañado de una salsa para mojar pan hasta decir basta. Y los postres caseros, especialmente el arroz con leche, nos hicieron cerrar la comida con una sonrisa.
Ideal para familias (y para tener a los críos entretenidos)
Zona exterior amplia, una especie de ludoteca dentro, y hasta mesa de ping pong con palas que puedes pedir. Mientras tú rematas el café o el digestivo, los peques están entretenidos. Aplausos por esto.
En el propio local hay una pequeña estantería donde puedes comprar productos de la zona: embutidos, miel, vinos… Está bien para llevarte un recuerdo o reponer provisiones. No es un mercado gourmet, pero cumple su función.
⚠️ Lo mejorable del Bar Mesón Las Menas
El tiempo de espera
Si vas en fin de semana o festivo, ten paciencia. No porque no quieran atenderte, sino porque suele estar lleno, y el equipo es reducido. Nuestra recomendación: si ves que está lleno y tienes hambre seria, elige platos que se preparen con antelación, como las migas, el plato de cuchara, patatas a lo pobre… y evita opciones que dependan mucho del momento.
El jamón asado algo seco (al menos el nuestro)
Fue el único plato que bajó puntos. Lo sirven en lonchas finas, con salsa para mojar, pero la carne estaba seca, sobre todo las primeras capas. Puede que sea cuestión de suerte o de la pieza en concreto, pero es un detalle que deberían revisar, porque el resto del menú estaba muy por encima.
📞 Consejo: reserva siempre
Aunque estés alojado en el Camping de Las Menas, no des por hecho que vas a tener mesa libre. El restaurante se llena (y con razón), así que si quieres asegurarte sitio, reserva con antelación, sobre todo si vas con niños o en grupo.
En definitiva, ¿recomendamos Bar Mesón Las Menas?
Sí, sin duda. Si estás por la zona, haces senderismo por Las Menas o estás alojado en el camping, el Bar Mesón Las Menas es una opción familiar, casera y con buena relación calidad-precio. Tiene sus cosas mejorables (como cualquier sitio), pero su ambiente acogedor, su carta pensada para familias y su comida de siempre lo hacen una parada más que recomendable.
No es un sitio para sacar fotos “foodie”, es un sitio para comer con gusto, con hambre real y en buena compañía. Y de eso, por suerte, no andamos escasos.
👉 👉 ¿Lo conoces? ¿Has comido allí? Cuéntanos tu experiencia en los comentarios o dinos qué plato no te puedes perder cuando visitas Las Menas
Nuestro resumen para Bar Mesón Las Menas
| Decoración | ★★★☆☆ |
| Atención | ★★★★☆ |
| Presentación | ★★★☆☆ |
| Sabor | ★★★☆☆ |
| Precio | ★★★☆☆ |
Esta reseña, como todas las nuestras, se basa en nuestra experiencia como clientes sin más. Esto no quiere decir que tu experiencia sea exactamente la misma, estaremos encantados de leer tu experiencia en los comentarios.
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